Esta tarta de boda, es un encargo de Antonio y Arantxa, para un día tan especial como su boda.
Cuando nos comunicaron que querían que fuésemos nosotros lo que le hiciésemos su tarta de boda, nos llevamos una grata sorpresa, para una bodaaaa!!!! pues si, nos hizo mucha ilusión que confiaran en nosotros, y ya que es nuestra primera tarta de boda sabíamos la responsabilidad que era, y para un día tan especial, pero claro, no dudamos ni un momento en decirles que síiiii, ya que era un reto muy bonito.
Cuando nos reunimos con ellos, para saber que idea que tenían sobre su tarta, nos contaron que querían una tarta elegante y fina, que tuviese capitoné, perlas plateadas y que fuese totalmente blanca. En vez de llevar muñecos de novios, que le pusiéramos dos rosas rojas (se eligió esa flor exactamente porque era la flor del ramo de novia).
Así que nos pusimos manos a la obra, hicimos cálculo de todo lo que nos hacia falta y a comprar!!!! Hicimos las rosas rojas con pasta de flores que teñimos de un rojo intenso y las dejamos secar. Y pronto llegó la hora de hornear... me encanta ese momento cuando el bizcocho esta en el horno y comienza a oler toda la cocina, es un momento para disfrutar.
La tarta la hicimos de dos tipos de bizcochos uno de naranja, relleno de ganache de chocolate y otro bizcocho de chocolate, relleno de nata con fresas, todos los pisos iban cubierto de fondant blanco.
Y ya horneados, rellenos y napados todos los bizcochos era el momento de empezar a cubrir cada piso con el fondant. El primer piso le hicimos un capitoné o acolchado con perlitas plateadas, el segundo piso le pusimos una gargantilla de perlitas plateadas con otras en forma de lluvia o cascada. Y el tercer y último piso lo dejamos blanco liso, coronándolo con dos rosas rojas.
Así que agradecemos la confianza depositada en nosotros por encargarnos este reto tan bonito, nos ha encantado hacerla, los novios quedaron encantados con la tarta y nosotros felices por ello.
¡¡¡¡¡Vivan los novios!!!!!
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